La escabiosis afecta a más de 200 millones de personas en el mundo y al parecer, su prevalencia en países desarrollados se ha incrementado en los últimos años. Según las estimaciones en España, el aumento de casos podría haberse triplicado en estos 3 últimos años. Sin embargo, esta incidencia podría ser aún mayor ya que los brotes individuales o intrafamiliares habitualmente no se declaran. Los médicos deben declarar sólo los brotes que tienen lugar en instituciones, ya sean residencias, centros de día, prisiones o centros de menores, entre otras.
¿Qué es la escabiosis o sarna?
La escabiosis es causada por el Sarcoptes scabiei var. hominis, un parásito humano obligado, que puede causar complicaciones importantes como impétigo, sepsis por Staphylococcus aureus, fiebre reumática y glomerulonefritis post estreptocócica, entre otras. El mecanismo de contagio es por contacto directo prolongado, y en algunos casos puede ser considerada una infección de transmisión sexual. El contagio por fómites es infrecuente, aunque puede ser importante en la sarna noruega, una variante de la sarna caracterizada por una infestación masiva por Sarcoptes scabiei. Además, esta enfermedad tiene un elevado impacto social y económico porque a su prevalencia creciente se le añade el alto coste del tratamiento y el rechazo social que genera.
La terapia tópica con permetrina 5% se recomienda como primera opción en el tratamiento de esta parasitosis. Se puede indicar durante el embarazo, lactancia y parece ser segura en niños menores 2 meses. Sin embargo, últimamente se ha reportado un incremento de la resistencia a este fármaco. Otra alternativa en primera línea terapéutica es la ivermectina oral, escabicida con excelente perfil de seguridad e incluido en el listado de fármacos esenciales por la Organización Mundial de la Salud. Los últimos estudios evidencian que es segura en niños y lactantes. En Francia también es indicada para la escabiosis durante el embarazo. Diversas revisiones sistemáticas y metaanálisis han concluido que la ivermectina oral es tan efectiva y segura como la permetrina tópica. La administración terapéutica “en masa” de ivermectina oral ha surgido como una excelente opción en el tratamiento de la escabiosis en comunidades con alta prevalencia de la parasitosis, o de brotes en instituciones. Alternativas terapéuticas de segunda línea incluyen a las formulaciones azufradas, bencil benzoato, malatión y crotamitón.
La ivermectina oral es tan efectiva y segura como la permetrina tópica
La ivermectina oral es un antiparasitario incluido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el listado de medicamentos esenciales para la humanidad. Es de bajo coste y tiene un excelente perfil de seguridad, con efectos adversos mayoritariamente leves y autolimitados.
Es altamente efectiva en el tratamiento de la escabiosis. Una revisión de la base de datos Cochrane no encontró diferencias significativas en las tasas de respuesta entre ivermectina oral y la permetrina 5% tópica. Ambas terapias fueron bien toleradas con efectos adversos escasos y leves. Un metaanálisis de 52 ensayos clínicos sugiere que el tratamiento más efectivo para la escabiosis sería la combinación de ivermectina oral y permetrina tópica, y no habría diferencias en las tasas de respuesta entre la permetrina tópica 5% y la ivermectina oral.
La ivermectina oral tiene diversas ventajas: es un tratamiento simple, seguro, económico y, probablemente, de mayor adherencia que los fármacos de aplicación tópica. La ivermectina no es ovocida, razón por la cual se recomienda la administración de dos dosis de aproximadamente 200 mcg/kg separadas por 7 días. La prescripción de una dosis en monoterapia tiene una eficacia significativamente menor.
Desde mediados del 2021 la ivermectina está disponible comercialmente en España con dosificación de 12 mg (4 comprimidos de 3 mg) (Ivergalen®, Galenicum Derma), lo que puede disminuir costes y simplificar su prescripción.
Según el Dr. Sebastian Podlipnik, dermatólogo adjunto en el Hospital Clínic de Barcelona, “la introducción de la ivermectina oral en España es una necesidad no cubierta hasta el momento que permitirá tratar la sarna de una forma más efectiva y con mayores tasas de cumplimiento terapéutico”. Según el doctor, “la aplicación de tratamientos tópicos a veces es dificultosa, no se realiza correctamente y es difícil coordinarlo a nivel de brotes comunitarios. En estos pacientes es fundamental contar con otras opciones terapéuticas como la ivermectina oral”.
